martes, enero 31, 2006

reflejos felinos... my ass

-Mamá, se me rompieron los lentes.
-¿Y ahora? ¿Pero cómo se han roto? Segurito los llevabas en el cuello, cuántas veces te he dicho que...
-No mamá, saltaron de mi cara.
-¿Y cómo así?
-Bueno, volaron a la pista junto a mí, justo después que me golpeó un mototaxi.
Carcajada de mi hermana, mientras mi madre en shock notaba recién mi mano ensangrentada.

Hoy me atropelló una moto. Bueno, la verdad no. Sólo me golpeó y me arrojó contra el pavimento. Nada del otro mundo. Tengo una mano casi desollada y me duele el hueso del codo que chocó con la moto. Claro, lo que más me va a doler es el bolsillo, después de desembolsar para comprarme lentes nuevos. Y me da cólera, porque todo el asunto fue de lo más estúpido.

Como nunca, me detuve a darle indicaciones a un señor que se acercó con cara de despistado y amablemente me preguntó por un centro de copiado; cuando terminamos y yo giraba para proseguir mi camino me doy de cara con el vehículo que venía en mi dirección, embalado. El empujón, el contrasuelazo y mis lentes hechos trizas. La mototaxi se detuvo y el conductor, un viejo recontra asustado, bajó a ver si estaba bien. Entre dientes le resondraba a la madre mientras me levantaba y le confirmaba que sí, que estaba bien. Tienes buenos reflejos, sentenció finalmente con una sonrisa nerviosa y se marchó.

Hoy definitivamente es uno de esos días en los que desearía no haber salido de casa...

9 comentarios:

Anónimo dijo...

:s vaya manera de acabar el mes...


Saludos

Anónimo dijo...

Sí, ya sospechaba que este mes no me iba a traer muchas alegrías. Febrero por otro lado... ;)

Akira por... Kurosawa? Toriyama? el anime de Otomo??

Anónimo dijo...

Muy bueno tu blog! ya te seguiré leyendo.

Saludos.

Anónimo dijo...

Y... bueno, que estás bien. Pobre tu madre. Oye, ¿has pensado alguna vez en las reacciones que tenemos ante una noticia de éstas? Es decir, yo llego a casa y le digo a mi mamá: me atropelló un mototaxi. Y mi madre, en el acto, empieza a imaginarse lo peor. Con un poco de suerte, no llorará mi muerte. Y yo misma, mamita, pero no pasó nada grave, estoy bien...

Así las madres y casi todos, jejejejeje

Bueno, manito, que estés bien... Y además de relejos gatunos, deberías fijarte mejor por dónde andas!!!

Besito!

Anónimo dijo...

Ursula: Gracias por el comentario!
Este blog es como yo: de perfil bajo y bastante insignificante por lo general... con uno que otro chispazo de genialidad de cuando en cuando -_- (pasan desapercibidos, pero por ahí han de estar).

Angelilla: Pero hombre, si siempre me fijo! Sólo que siempre no se aplicó esta vez...
Disfruta la estadía en Lima. Si logras quedarte por acá el siguiente fin de semana somos playa!

Anónimo dijo...

Vaya, a mí me pegó una moto lineal el otro día -una de esas que en Piura pululan cual amenazas asesinas en dos ruedas-, pues bueno, fue durante el desarrollo de una comisión periodística... claro, el susto fue mayor que las consecuencias, y eso me valió para reparar en el peligro que representan las motos lineales... (y yo que era amigo del secretario general de su gremio).

Anónimo dijo...

Por lo pronto el servicio de transporte en moto lineal me sigue pareciendo una maravilla de la practicidad: es barato y veloz. Realmente tendría que atropellarme también una de esas para que les pierda fe.
Por suerte en tu caso tampoco hubieron consecuencias muy graves

Anónimo dijo...

Así que te sacaste la micho no????....mmmm..... qué bueno!!!! mal amigo!!!! eso te pasa por venir a Chiclayo y no pasar la voz!!!! sí!!! ya lo sé!!!!! se le salió a la Clau!!!!!! You broke my heart Fredo!!!!!! Buuuuuuuuuuuuuuuuu

Anónimo dijo...

Rica, perdón. Ya te lo compensaré uno de estos días. Te caigo en Chiclayo y nos vamos a parrandear por ahí ¿sale?